"busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la brecha delante de mí, a favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo hallé."
Reconozca el llamado.
La sensibilidad al Espíritu Santo es una de las condiciones esenciales para escuchar el llamado de Dios y atenderlo. Somos conscientes de que no estamos dentro del ministerio por nuestros dones, talentos o habilidades, sino por la gracia de Dios para con cada uno de nosotros. "Pues a cada uno de nosotros fue dada la gracia conforme a la medida del don de Cristo" Efesios 4:7. Cuando somos sensibles al Espíritu, los dones empiezan a ser revelados a nuestras vidas. Efesios 4:11,12. Estos cinco ministerios, son la extensión del carácter de Cristo dentro de nosotros.
En el reconocimiento del llamado intervienen varios aspectos:
a) Convicción.
b) Compromiso.
c) Quebrantamiento. Juan 12:24.
d) Unción. Jueces 15:14.
e) Sujeción. Romanos 13:1-2.
f) Fructificación. Lucas 17:10.
La sensibilidad al Espíritu Santo es una de las condiciones esenciales para escuchar el llamado de Dios y atenderlo. Somos conscientes de que no estamos dentro del ministerio por nuestros dones, talentos o habilidades, sino por la gracia de Dios para con cada uno de nosotros. "Pues a cada uno de nosotros fue dada la gracia conforme a la medida del don de Cristo" Efesios 4:7. Cuando somos sensibles al Espíritu, los dones empiezan a ser revelados a nuestras vidas. Efesios 4:11,12. Estos cinco ministerios, son la extensión del carácter de Cristo dentro de nosotros.
En el reconocimiento del llamado intervienen varios aspectos:
a) Convicción.
b) Compromiso.
c) Quebrantamiento. Juan 12:24.
d) Unción. Jueces 15:14.
e) Sujeción. Romanos 13:1-2.
f) Fructificación. Lucas 17:10.
Recuerde: El Señor tiene una misión asignada para su vida. “Sé fiel al llamado que los ojos de Dios están puestos en ti”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario